Te extraño miles de hojas destinadas a ponderarte. Te extraño
cientos de besos contenidos en los labios. Te extraño decenas de cafés enfriados
de melancolía por pensarte. Te extraño una imagen fija de mi puerta esperando
tu regreso. Te extraño…
Escribo. Escribo con el anhelo de que alguien lea más que las palabras plasmadas. Es como el deseo de que me desnuden del alma para afuera, para derribar mi ego. Que quien me lea, traspase mi fortaleza, el refugio de las palabras. Que me despoje de mi coraza y me inserte en la tierna timidez, en la baja guardia de la desnudez, de la desnudez de palabras.
viernes, 29 de enero de 2016
lunes, 4 de enero de 2016
Advertencia al lector
Los escritos que en este blog se exponen, expresan los
alborozos y agobios imperantes de una mente inquieta e inestable. La autora se referirá
a este vuelco de sinceridad literaria
como esbozos literarios. Todos los textos fueron escritos en un estado de abstracción
absoluta, entiéndase la falta de estatutos y pudores. La autora no asume
responsabilidades de herir y/o perturbar sensibilidades.
El lector puede abandonar la lectura cuando lo desee o lo
crea conveniente; pudiendo también retomarla sin indicación ni consulta previa
como remedio al insomnio, stress, desamor, falta de motivaciones, depresión y/o
soledad (reacciones adversas al dorso). Cualquier semejanza con la realidad, es
pura experiencia intima de la autora y/o paralelismo existencial entre la misma
y el/los lector/es.
En caso de emergencia, apague el dispositivo desde donde lee
estas líneas y diríjase a su ser querido más cercano. Por dudas o consultas,
escuché a su corazón. Si tiene dificultades para comunicarse con él, se recomienda
leer un poema al azar de Benedetti. Para mejores resultados, complementar con
un poema de un autor que no conozca (la curiosidad es un síntoma que empeora o
persiste).
Lectura libre – Compatible con otras lecturas.
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