jueves, 4 de febrero de 2016

Llegá pronto, por favor

Mi amor, hoy supe que sos un varoncito. Ya te imagino tan hermoso como tu papá y tu abuelo, un negrito de pelo bien enrulado.  Hoy te vi, mi amor, y me pareciste lo más precioso del  planeta. Sos muy chiquito, apenas  900 gramos. Todavía no tenes un nombre definido, llevo meses esperándote y amándote y solo me sale decirte mi amor. Te llamo así desde el preciso momento en que supe de vos.
Te estoy esperando con ansias. Tengo tanto amor y todo destinado para vos. Somos muchos, en realidad, los que estamos tachando los días del calendario. Vas a nacer pronto. Vas a nacer, vas a burlarte de todo pronóstico, vas a traer vida y alegría a la familia. Hablando de eso, te va a recibir una familia destartalada pero te vas a encontrar con muchos brazos abiertos. No te preocupes cuando nos veas llorar; es la alegría, es el miedo, la inexperiencia y el sinfín de sensaciones que nos vas a hacer conocer.
Tu papá es muy joven, tenele mucha paciencia. Desde ya, te va a hacer hincha de central. A tu mamá todavía no la conozco, así de descocida es la familia, pero sé que es una mujer muy fuerte. Tu abuelo está loco, entre tantas otras razones, por conocerte. Tíos, vas a tener a montones, de sangre y del corazón; prepárate para los besos y las voces distorsionadas para hacerte reír. De mí, ¿qué contarte? Ni siquiera puedo explicarte este amor que se me debe escapar por los poros para no hacerme estallar. Yo me quedaría abrazada a la panza de tu mamá los meses que quedan hasta tu nacimiento si eso me asegurara que vos estés bien.
Vos vas a venir a unirme todos los pedacitos rotos del corazón. A desafiar la suerte de esta familia. Venís para vivir, para colmarnos de amor, de ese que nos vimos obligados a encajonar pero no lo hicimos y ahora vuelve con más fuerzas. Venís para enseñarnos mil cosas, para hacernos emocionar, para darnos esperanza. Sos la prueba de que la vida siempre se hace lugar, se abre paso entre tanta pena e incertidumbre. Sos un motivo más, el más hermoso de todos, para querer despertarnos y progresar.

Mis suspiros, ya son todos para vos, mi amor. Te espero. Llegá pronto, por favor.